Inicio Ginecoestética Láser de CO2 para mejorar la salud femenina

Láser de CO2 para mejorar la salud femenina

La Dra. Paloma Cornejo, dermatóloga ha presentado el láser CO2RE de Candela, con tres aplicadores desechables para mejorar el tratamiento funcional y estético de la mujer. Recomendado para problemas asociados a partos y menopausia como es el síndrome genitourinario (atrofia vaginal de la menopausia).

“Es una alteración que se caracteriza por síntomas como sequedad, prurito, ardor, el dolor al orinar (disuria) o el dolor durante las relaciones sexuales (dispaurenia). A diferencia de los síndromes vasomotores como son los sofocos, estos van a más desde su aparición y se asocian a problemas cutáneos de los genitales externos como el liquen escleroso o infecciones vaginales de repetición, de orina o la incontinencia urinaria de urgencia”.

Opciones terapéuticas

“Para aliviar los síntomas del síndrome genitourinario de la menopausia, indica la doctora, “en la actualidad, se dispone de:

Estrógenos locales. Efectivo y seguro en dosis muy bajas. Con dudas sobre su seguridad a largo plazo y por la ausencia de alivio en todos los síntomas.

Hidratantes y/o lubricantes. Se presentan en forma de crema o gel y mejoran la sequedad vaginal durante las relaciones pero carecen de efectos terapéuticos a largo plazo.

Ospemifeno. Un modulador selectivo de los moduladores estrogénicos de la zona. Tratamiento oral, efectivo y seguro para la dispareunia.

Terapia hormonal sustitutiva. Alivia los síntomas del climaterio y especialmente los sofocos pero con más efectos secundarios que la terapia local.

Láser (CO2, Erbio Yag). Aprobado por la FDA en 2014 para el Síndrome Genitourinario de la Menopausia”.

CO2RE Íntima

Paloma Cornejo explica que, “este es un láser de CO2 fraccionado, microablativo de dióxido de carbono, para revertir los efectos del envejecimiento genital femenino, restableciendo su aspecto y funcionalidad. Emite una energía térmica que estimula la regeneración y remodelado tisular. Su objetivo es atenuar los efectos del parto (laxitud vaginal, incontinencia urinaria), así como los síntomas del Síndrome Genitourinario (atrofia vulvovaginal). Este procedimiento ambulatorio para las tres zonas íntimas (interna, externa e introito), es mínimamente invasivo y bien tolerado.

Estimula los fibroblastos. Se produce más colágeno y elastina para recuperar la flexibilidad de la atrofia vaginal.

Restablece el tono muscular. Con un tensado de las estructuras de soporte para el tratamiento de la holgura vulvovaginal.

Incrementa la angiogénesis. Mejora la nutrición, flujo vascular y permeabilidad de la mucosa.

Promueve componentes de la matriz extracelular. Alivio de la sequedad y regeneración del epitelio”.