Inicio Ginecoestética Es imprescindible no relajar las pautas de higiene íntima en el confinamiento

Es imprescindible no relajar las pautas de higiene íntima en el confinamiento

Según indica la Dra. Belén Gómez, ginecóloga del Hospital Infanta Leonor: “hablar de pH en la piel significa hacerlo de la concentración de hidrógeno que hay en una sustancia, y es que bajo sus siglas se esconde el término “potencial de hidrógeno”, medida que va de 0 a 14, siendo 7 la neutralidad, ácidos los valores descendentes y alcalinos los ascendentes. Es importante tener en cuenta el valor del pH, porque es un valor que influye activamente en nuestra vida diaria ya que muchas enzimas, moléculas y procesos celulares necesitan un pH específico para su funcionamiento óptimo.

La piel tiene un pH ligeramente ácido para protegerse de agentes invasores y estrés ambiental. Este pH se produce en una capa existente entre la epidermis y la dermis llamada hipodermis y varía entre 4,5 u 5,9. No es igual el pH de la piel de los hombres que el de las mujeres. En el hombre es ligeramente más ácido, se sitúa en torno a 4,8 y el de las mujeres en 5. El pH de la piel puede variar por factores externos, como tomar el sol o algunos productos cosméticos y también varía entre una zona del cuerpo y otras. Por ejemplo, es más ácido en las axilas, entre los dedos y en la zona íntima”.

pH íntimo

Además la doctora indica que, “en el caso de la zona íntima, la vagina porta una serie de microorganismos, entre ellos bacterias (al igual que en el intestino), que se llaman lactobacillus. Estas bacterias emplean el glucógeno de los tejidos de la mucosa vaginal y lo metabolizan en ácido láctico, que es el que hace que disminuya el pH de vaginal y mantiene ese ambiente ácido que impide el crecimiento de la mayoría de los patógenos. El pH de la zona genital es específico y debe estar en torno a 3.5 – 5. Este pH más ácido que el del resto del cuerpo condiciona la existencia de gérmenes y patógenos, ya que crea un ambiente hostil para el crecimiento de muchos hongos y bacterias, evitando infecciones, sequedad, irritación y picor”, afirma. “Además, el hecho de tener un pH u otro también se ve afectado por los productos de higiene que utilizamos. Nuestro objetivo es mantenerlo en niveles adecuados para evitar infecciones”.

El pH íntimo puede variar a lo largo de la vida

“El pH íntimo”, indica la Dra. Gómez, “puede variar debido a diversos factores hormonales, ambientales, químicos o sexuales. Además, en las diferentes etapas en la vida de una mujer va evolucionando. Pero cuanto más ácido es el pH, más protección hay. Según la especialista cabe destacar:

  • Antes de la primera regla: el pH toma valores entre 6,8 y 7,2.
  • Durante la menstruación: toma los mismos valores que durante la infancia, entre 6,8 y 7,2.
  • En los días antes de la menstruación: entre 3,8 y 4,2.
  • El resto del ciclo: entre 4 y 5.
  • Durante el embarazo: algo menos a 4.5
  • Durante la menopausia: valores próximos a 7”.

Esta noticia ha sido realizada con la información aportada por la empresa Chilly Pharma.