Según explica el Dr. Fernando Aznar, ginecólogo estético de Clínica FEMM: “existen diversas cirugías para la reconstrucción del clítoris y su capuchón, entre las que se encuentran la clitoroplastia, clitoropexia y hoodoplastia y con estas intervenciones se busca devolver la normalidad y armonía al clítoris.
El clítoris es una zona fundamental del área genital femenina. Es un órgano sexual esencial en el que se concentra el placer durante las relaciones sexuales. En ciertas ocasiones esta región puede sufrir algunas alteraciones como pueden ser:
– Hipertrofia: El clítoris crece de manera desproporcionada por causas genéticas o endocrinas.
– Desarrollo de alguna lesión o tumor.
– Exceso de tejido en el capuchón que impide que el clítoris se exponga durante la estimulación, disminuyendo e incluso anulando el placer.
Además de los problemas funcionales que todo esto puede generar, también se considera el aspecto estético.
Clitoroplastia
La clitoroplastia es la técnica quirúrgica con la que se reseca la parte del tejido afectado en mujeres con tumores y lesiones en el clítoris.
Clitoropexia
Intervención quirúrgica en la que se lleva a cabo la fijación del cuerpo el clítoris al ligamento suspensorio para evitar su sobre-exposición especialmente en mujeres con hipertrofia de clítoris, debido a la toma de esteroides o testosterona.
Hoodoplastia
La hoodoplastia (por su nombre en inglés) o reducción del capuchón del clítoris consiste en la técnica quirúrgica para resecar el exceso de piel que recubre el clítoris. Habitualmente se realiza de manera asociada a una labioplastia, como técnica combinada para obtener un resultado armónico”.