Inicio Ginecoestética Fisiología y fisiopatología de los procedimientos láser vulvovaginales

Fisiología y fisiopatología de los procedimientos láser vulvovaginales

El Dr. Santiago Palacios, ginecólogo con una dilatada experiencia y presidente del Comité Científico-Deontológico de SEGERF, explica la importancia de los procedimientos con láser vulvo-vaginal y sus técnicas en cada una de las distintas patologías y según la demanda actual de la mujer en ginecología regenerativa. “Los láseres y su uso en el área vulvo-vaginal tienen unos campos muy claros. Uno es la hiperlaxitud vaginal, ya que después de un parto la vagina se distiende enormemente y en algunos casos eso produce una serie de problemas clínicos como la incontinencia urinaria, que alteran la calidad de vida sexual de la mujer. Esta situación, según parece, se produce porque cuarenta y ocho horas antes del parto se genera una gran cantidad de relaxina que relaja todos los ligamentos de la zona para que pueda existir el parto. La “pregunta que hay que contestar” es, cuál es la razón fisiopatológica por la que algunas mujeres al cabo de seis meses mantienen esa hiperlaxitud y la vagina no vuelve a su origen. La respuesta puede ser que pudo haber una rotura de fibras por posible falta de relaxina. De acuerdo con esta situación, en el futuro, además del láser, se podría aplicar relaxina”.

Combinación de diferentes tratamientos

El Dr. Palacios destaca la importancia de la combinación de diferentes tratamientos junto con el uso de láser. “Así, por ejemplo, podría usar el láser para la atrofia vulvovaginal junto con los hidratantes vaginales, los estrógenos locales, otros tipos de antioxidantes y los SERMs (moduladores selectivos de los receptores estrogénicos específicos para la vagina, como es el ospemifeno). Puede haber diferentes pautas y, es necesario conocer cuál es la mejor. El  interrogante está en saber si sería beneficioso tratar con estrógenos locales u ospemifeno a una mujer con atrofia vaginal antes y/o después del láser o si es suficiente con aplicar solo el láser”.

“Eso podría hacer que el efecto durase más y que el láser recordatorio anual pudiera retrasarse. En estos momentos, se piensa que sí, pero hay que ratificarlo”.

“Donde ya sí tenemos datos para comparar resultados”, continúa explicando el Dr. Palacios, “es con la eficacia de estrógeno local para la atrofia vulvovaginal versus la aplicación de solo láser y, en esta circunstancia, hemos visto que la eficacia es igual. Por lo que podemos decir que el láser vaginal en mujeres con atrofia vulvovaginal tiene el mismo resultado que los estrógenos locales. Podemos añadir que el cumplimiento con láser es mejor, porque así las mujeres no tienen que estar aplicándose dos veces semanales un producto dentro de la vagina, con la manipulación que conlleva e inconvenientes de los tratamientos locales”.

El Dr. Palacios habla sobre el importante papel que tiene el uso del láser para la incontinencia urinaria de esfuerzo, “un tema apasionante, porque hasta ahora teníamos los ejercicios de Kegel y la cirugía. Hoy tenemos un paso intermedio con la posibilidad de un método no agresivo como es el láser y esto nos abre muchas opciones, con unos resultados del 60 o 70% de eficacia”.

Sobre la eficacia de otros tratamientos para mejorar y retrasar el envejecimiento vaginal, el doctor indica: “hay estudios en los cuales se empieza a analizar y conocer un poco más la composición de la vagina en cuanto a cantidad, calidad y tipo de fibroblastos, producción de los diferentes factores de crecimiento, colágeno y el tipo de colágeno que los fibroblastos producen, etc. Todo esto nos va abrir la posibilidad en el futuro de comprobar qué sustancias antioxidantes pueden ser útiles, quitando el ya famoso PRP (plasma rico en plaquetas) cuyo uso está claro, al igual que las células madre. Estoy seguro de que va a haber una serie de sustancias que utilizadas con anterioridad y/o posterioridad al láser, mejorarán sus resultados”.