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Recomendaciones para una salud sexual óptima

La Dra. Victoria Verdú, coordinadora de Ginecología y Obstetricia de la Clínica Ginefiv, para concienciación sobre la necesidad de mantener unos hábitos sexuales saludables, con especial foco en la rutina personal, la especialista recuerda el impacto que las enfermedades de transmisión sexual ejercen sobre la salud y calidad de vida y hace hincapié sobre la importancia de usar protección adecuada a la hora de mantener relaciones sexuales, para ello ofrece unas recomendaciones a tener en cuenta de cara a una práctica sexual segura, cuidada y placentera:

  1. Practicar ejercicio de forma asidua. El deporte puede convertirse en un gran aliado de cara a mejorar las relaciones sexuales. Más allá de trabajar sobre la condición física, realizar ejercicio de forma constante y regular puede aportar una dosis extra de energía a las personas, promoviendo el alcance de un estado de satisfacción.
  2. Mucho cuidado con el estrés. Enfrentar situaciones o etapas de la vida donde prime el estrés puede acabar reduciendo el apetito sexual de manera considerable. Hay que tener en cuenta que la ansiedad actúa negativamente sobre el nivel de testosterona en sangre, provocando esa caída del deseo sexual involuntaria.
  3. Mantener una alimentación rica y saludable. Aportar al organismo una dieta rica en nutrientes y vitaminas puede llegar a ser muy beneficiosa. En cambio, en el caso de los hombres, basar la alimentación en un exceso constante de grasas saturadas puede acabar repercutiendo a futuras relaciones sexuales, incidiendo de manera negativa sobre la concentración de espermatozoides durante la eyaculación.
  4. Usar métodos anticonceptivos. “El conocimiento es poder” y ser plenos conocedores en la materia, y de cada una de las alternativas existentes dentro del mundo de los anticonceptivos, resulta imprescindible para llevar a cabo una salud sexual óptima. Y no solo con el objetivo de evitar embarazos no deseados, sino también como prevención de enfermedades de transmisión sexual (ETS).
  5. Conocer y conocerse. Disponer de una buena información sexual y estar al tanto de todo el material disponible resulta también muy favorable para asegurar una salud sexual óptima. Asimismo, ser conocedores de nuestro propio cuerpo, saber identificar nuestros límites y aprender a quererlo y cuidarlo también es importante para favorecer el bienestar de cada individuo.
  6. Acudir de forma periódica al especialista. Visitar de forma anual al ginecólogo y urólogo ayudará a prevenir de forma precoz futuras anomalías, como puede ser el cáncer de mama y de cuello de útero o próstata. Además, el especialista siempre va a ayudar a despejar cualquier duda acerca de los hábitos recomendables para hacer frente a un buen estado de salud.