La medicina biológica y reparadora ha irrumpido con fuerza en la práctica médica y nunca había sido tan real la frase de: “el futuro hecho realidad”. El Dr. Fernando Aznar es ginecólogo, jefe de la Unidad de Ginecología Regenerativa del Hospital Cruz Roja (Córdoba) y se muestra categórico al afirmar que: “el potencial uso de los exosomas en la práctica clínica diaria es inabarcable”. Hablamos con él para que nos explique qué son y su aplicación práctica en la especialidad:
“Los exosomas son pequeñas vesículas extracelulares, ‘pequeñas burbujas’, con unos diámetros entre 40-100 nm, que se producen en los endosomas de las células que contienen diversas moléculas bioactivas: ADN, ARNm, proteínas, lípidos, aminoácidos, metabolitos…
Han sido estudiados durante muchísimos años, con la creencia de que eran los productos de desecho derivados del metabolismo celular y eran expulsados por las células durante la exocitosis. Actualmente, se ha corroborado que representan un mecanismo básico de comunicación celular y el transporte macromolecular intercelular, sobre todo de las células madre locales en el tejido y de las células inmunitarias. Trasportan la información necesaria y la codificodificación para la restauración de las células y de los tejidos dañados”.
De aplicación transdérmica
Al explicar sus beneficios y aplicación práctica en la clínica, el doctor dice: “A día de hoy, en Europa, los exosomas son considerados producto cosmético, debiéndose utilizar en aplicación transdérmica. Vienen liofilizados en polvo (50 mg) en viales estériles, y se reconstituyen con 5 ml de ácido hialurónico no reticulado en unos pocos minutos. Dependiendo de los protocolos e indicaciones puede variar, pero se recomiendan 5 sesiones con un periodo de 15 días entre cada sesión. Aunque hay exosomas comercializados derivados de plantas, de vegetales o de leche animal, también hay ya derivados de líquido amniótico humano, de grasa humana o de cordón umbilical, siendo cultivados y filtrados en laboratorios de alta tecnología.
Las posibilidades terapéuticas aplicando exosomas van a suponer un antes y después para la regeneración del cuerpo humano y los avances que se están percibiendo día a día en la práctica clínica en piel, cabello y en la esfera íntima son excepcionales. Sin contar el posible potencial de los exosomas en la regeneración neuronal en enfermedades degenerativas del SNC (sistema nervioso central) o en la recuperación del tejido miocárdico infartado, así como de la capacidad para recuperar la función hepática en pacientes cirróticos o, incluso, en cegueras ocasionadas por retinopatías.
Efectos principales en la piel
- Antiinflamatorio. Este es su efecto más notable junto con el de modulador de la cicatrización. Se utiliza como alternativa a los esteroides para todo tipo de dermatitis y dermatosis, el acné inflamatorio, la dermatitis atópica, y en cuidados post-tratamientos y post-cirugía.
- Antioxidante. Ayudan a suprimir la actividad de los radicales libres oxigénicos como un potente antioxidante, previniendo el envejecimiento celular.
- Regenerativo. Inducen la regeneración de células dañadas a través de efectos paracrinos tisulares. Tiene una amplia versatilidad al reconstruir las diferentes capas de la piel y crear nuevos vasos sanguíneos.
- Blanqueador. Incluso ayudan a mejorar el color al reducir la producción de melanina en la piel.
Concluye el Dr. Aznar diciendo: “En ginecología regenerativa, estoy convencido de que esta terapia con exosomas está llamada a sustituir en todas las indicaciones clínicas al plasma rico en plaquetas y a la terapia con ADSC en el nanofat, incluido el factor vascular estromal. Dentro de unos años se verá anecdótico realizar liposucciones o sacar sangre en los pacientes para realizar terapias regenerativas”.