La Sociedad Europea de Reproducción Asistida y Embriología pide evitar nuevos embarazos en tratamientos de infertilidad.
A la espera de que, durante la evolución de esta crisis sanitaria, se puedan recopilar los datos estadísticos necesarios para obtener estudios concluyentes, el Ministerio de Sanidad ha publicado el protocolo ‘Manejo de la mujer embarazada y del recién nacido con Covid-19‘, donde se destaca, en primer lugar, los pocos casos existentes de embarazos y covid hasta el momento, se concluye que las mujeres embarazadas no constituyen en sí un grupo de riesgo similar al de que pueden presentar los ancianos o personas inmunodeprimidas.
Sí señala dicho documento que este virus ataca más al hombre que a la mujer, según explica el director médico de Clínicas Eva, el Dr. César Lizán, “la infección afecta a embarazadas en todas las edades gestacionales. La mayoría de los casos en mujeres gestantes cursan con síntomas leves y no se han observado posibles repercusiones fetales. No obstante, puntualizan, es imprescindible tener en cuenta que el embarazo y el puerperio suponen un estado de imnunosupresión que puede hacer a la mujer embarazada más vulnerable, por lo que hay que extremar las precauciones”.
Fecundación in vitro
En este sentido, y tal como ocurre en todos los sectores sanitarios, la actividad ha quedado supeditada a las recomendaciones generales que viene recordando el gabinete de crisis designado por el ejecutivo. Las clínicas de reproducción asistida han suspendido su actividad y atienden vía telefónica a cuestiones urgentes de las personas a las que esta pandemia ha sorprendido en pleno tratamiento.
Es el caso, explica el Dr. Lizán, “de quienes se encuentran en medio de un tratamiento de Fecundación In Vitro. El procedimiento a seguir en esta situación inaudita es “acabar los ciclos de FIV que se encontraran en marcha en el momento de la declaración del estado de alarma hasta realizar la punción ovárica para extraer y vitrificar los ovocitos. Es decir, que no se continuará con el resto del procedimiento, consistente en la fecundación en el laboratorio del material genético recogido, sino que se congelará para proceder, cuando todo pase, a la obtención de los embriones y su posterior implantación en el útero materno”.