La cistitis es la infección más común entre las mujeres, sobre todo entre los 22 y los 44 años. Una de cada cuatro la padecen entre dos y cuatro veces al año (lo que se conoce como cistitis de repetición) y fundamentalmente en verano. ¿Y por qué en esta época? el Dr. Gonzalo Sanz, urólogo y director médico de Clínica Premium Marbella, explica sus diferentes causas:
En estos meses se produce una mayor sudoración; el cuerpo sufre frecuentes cambios de temperatura al pasar del calor del exterior al frío de agua; se produce un aumento de las relaciones sexuales, permanecemos con la zona íntima húmeda mucho tiempo al no cambiar el bañador mojado por un seco y esto eleva la humedad convirtiendo la zona íntima en un ambiente un ambiente propicio para la proliferación y el crecimiento de microorganismos y bacterias.
Síntomas
Los síntomas más frecuentes de la cistitis son: la necesidad de ir al baño con más frecuencia de la habitual, sentir molestias o ardores en el momento de orinar, dificultades en la micción que pueden ir acompañadas de una orina oscura e incluso con sangre, dolor lumbar o en la pelvis y la sensación de quedarte con ganas tras haber orinado.
Aunque este tipo de infecciones, más comunes de lo que imaginamos, no suelen presentar complicaciones y tienen tratamiento farmacológico sencillo, si se detectan uno o varios síntomas y sobre todo si persisten y/o se han sufrido dos o más episodios al año, es necesario acudir al urólogo, ya que la cistitis e infecciones urinarias podrían hacerse crónicas.
En la mayoría de los casos (80%) la bacteria causante de la cistitis es la Escherichia Coli (E. Coli) que se adhiere a las paredes del tracto urinario de forma que no puede ser expulsada por la orina
Tratamiento
Incorporar hábitos de alimentación saludables y medidas higiénicas son las principales medidas que podemos tomar prevenir las infecciones urinarias. Además, el especialista explica que es importante:
– Beber al menos 2 litros de agua al día.
– Mantener la zona íntima lo más seca posible.
– Utilizar jabones neutros, sin perfume, para la zona íntima.
– La ropa interior tiene que permitir la transpiración adecuada, preferiblemente de algodón.
– La higiene de la zona íntima es fundamental, por ello debe limpiarse de adelante hacia atrás.
– Es importante orinar después de mantener relaciones sexuales.
– El consumo frecuente de arándanos rojos ayuda a combatir la cistitis.
– Evitar el estreñimiento.
– Limitar el consumo de alcohol y el exceso de comidas especiadas.
– Evitar abusar del uso de tampones.