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Ácido hialurónico de aplicación ginecológica

Dra. Eva Guisantes. Ácido hialurónico

Es uno de los productos más utilizados por su versatilidad, seguridad y eficacia. La Dra. Eva Guisantes que es cirujana plástica de la Clínica Mandri (Barcelona), nos habla de las novedades, como el ácido hialurónico, para la aplicación de tratamientos en el área genital femenina:

“El ácido hialurónico (AH) es un mucopolisacárido que se emplea desde hace décadas a nivel facial para mejorar la hidratación, la calidad de la piel, dar volumen y modelar contornos. También, desde hace unos años, su uso se ha incrementado mucho para el área genital femenina”.

Diversos usos

“Sus aplicaciones ginecológicas son múltiples”, continúa explicando la doctora. “Está indicado en la hidratación vaginal en los casos de sequedad vaginal por el síndrome génito-urinario de la menopausia (SGM), postparto, efectos de algunos medicamentos, tratamientos hormonales o de cáncer de mama u ovario. En estos casos, la inyección vaginal de AH va a mejorar la lubricación, la turgencia, la elasticidad y el trofismo de la mucosa vaginal, reduciendo el dolor en las relaciones sexuales, el picor y las molestias. El AH, además, acidifica el pH vaginal reequilibrando la flora y evitando infecciones vaginales de repetición.

También puede emplearse para tratar la atrofia vulvar de los labios mayores. Su inyección en esta zona permite restaurar su volumen y mejorar la protección del introito vaginal, preservando su humedad natural”.

Todos ellos, afirma la doctora, “son tratamientos que generalmente se realizan una vez al año. En el caso de cicatrices de episiotomía dolorosas, el AH permite reducir la fibrosis y la tensión de la cicatriz, mejorando su elasticidad y disminuyendo el dolor en las relaciones sexuales”.

En combinación

“Como novedad, actualmente, disponemos en el mercado de AH específicos para la zona genital femenina que pueden combinarse en la misma sesión con dispositivos basados en energía, como la radiofrecuencia, las luces infrarrojas, el láser o los ultrasonidos, sin que ello suponga una aceleración en su degradación. Esto es debido a que se trata de AH pegilizados, es decir, con una tecnología de reticulación basada en el polietilenglicol (PEG) como agente reticulante, y en la adición de aminoácidos osmorreguladores (glicina y prolina) en su composición. De esta forma se pueden realizar tratamientos combinados de AH y aparatología con un efecto sinérgico que mejora los resultados. Así mejoramos la salud íntima de nuestras pacientes, su bienestar físico, emocional y su calidad de vida”. Para finalizar, la Dra. Guisantes advierte que, “estos tratamientos deben ser realizados por profesionales con experiencia”.