Tener una buena salud sexual es fundamental para el bienestar físico y psicológico de la mujer y conocerla de la mano de expertos puede resultar clave para mejorar distintos aspectos como la falta de deseo, las disfunciones sexuales o la aprensión o tabúes que muchas veces se generan en torno al sexo. A esto se le añaden los distintos mitos que rodean a la sexualidad femenina.
Por ello, para entender y mejorar la sexualidad, los especialistas insisten en la necesidad de comprender su significado. “La sexualidad engloba al conjunto de condiciones anatómicas, fisiológicas y psicológico-afectivas, pero también al conjunto de comportamientos y prácticas encaminadas a la búsqueda del placer sexual y la reproducción. Todo ello va a estar presente en nuestras vidas desde que nacemos y en nuestras distintas etapas”, señala la Dra. Francisca Molero, presidenta de la Federación Española de Sociedades de Sexología (FESS). En este sentido, es importante que las mujeres conozcan su sexualidad para poder hacer un buen uso de ella ya que le va a beneficiar en todas las esferas de su vida diaria y contribuirá a mejorar su bienestar.
Claves para tener una buena salud sexual
Entre las claves más destacadas, según indican los expertos, para mejorar la salud sexual se encuentran:
– Seguir un estilo de vida saludable: tener un estilo de vida saludable, siguiendo una alimentación equilibrada y practicando ejercicio, nos dan el aporte necesario de energía para mantenernos activos y con ganas de practicar relaciones sexuales. Por otro lado, una mala alimentación puede también producir algún desequilibrio hormonal que puede interferir tanto en el deseo como en el estado de los órganos genitales femeninos.
– Tener una buena relación y comunicación con la pareja: es importante que la relación de pareja permita una confianza y comunicación que ofrezcan a las dos partes la posibilidad de hablar sus problemas, deseos o necesidades en cuanto al sexo. A muchas mujeres les cuesta llegar al orgasmo debido a que no sienten placer o no se comunican de forma erótica con su pareja, ya sea por vergüenza o por la dificultad para expresarse.
– Prevenir las infecciones de transmisión sexual (ITS): es un aspecto clave para una buena salud sexual y para ello es imprescindible el uso de métodos anticonceptivos de barrera que contribuyan a prevenir el contagio de ITS, como el del VPH.
– Pensar en una vida sexual plena más allá del coito: una vida sexual plena no solo tiene que ver con el coito. En la sexualidad interviene todo el cuerpo: la mente, los sentimientos y las emociones y, en determinados casos, la persona con la que en ese momento se comparten las relaciones. Pero tenemos que pensar en la sexualidad de nosotras mismas y en la sexualidad con la pareja.
– Buscar ayuda en caso de bajo deseo o dificultades para mantener relaciones: en el caso de que existan circunstancias que impidan mantener unas relaciones sexuales satisfactorias, bien por falta de deseo o bien por dificultades fisiológicas, lo mejor es buscar ayuda de un especialista. Por otro lado, existen complementos de origen natural que contribuyen a estimular las hormonas fisiológicas favorecedoras del deseo.
– Tener una buena hidratación: en distintos momentos la mujer puede sentir falta de hidratación y sequedad en la zona vaginal, como consecuencia del estrés, por ejemplo, en la etapa de lactancia o la menopausia.
La información como ayuda
Para ayudar a las mujeres a mejorar su salud sexual, desmontar falsas creencias y ofrecer información sobre todo lo relacionado con ella, Procare Health, laboratorio especializado en salud femenina, y Santa Mandanga, Escuela Digital de Educación Sexual, han creado una serie de podcasts que contarán con la participación de la Dra. Molero. En cada capítulo habrá una charla con mujeres de distintos perfiles: sexólogas, ginecólogas, influencers, etc.; en las que abordarán temas como la libido y el ciclo menstrual, el orgasmo, las fantasías sexuales o la belleza, entre otros.